Amenidades que valen: ¿por qué un gimnasio, coworking y pet-park pueden subir hasta un 20 % la renta en la CDMX?

El mercado de la renta en la Ciudad de México está experimentando una transformación. Ya no basta con que el departamento esté bien ubicado y tenga buen precio. Lo que define la preferencia de los inquilinos modernos es la experiencia de vida. Como lo señala un artículo de El Economista: “el valor ya no está en los metros cuadrados … sino en la experiencia de vida”.

Según datos de Mercado Libre Inmuebles, los costos de renta promedio en 2025 rondan los 21 000 pesos mensuales en la ciudad, aunque el rango es muy amplio dependiendo de ubicación y características.

Lo que interesa: cuando un edificio ofrece amenidades de calidad —gimnasio, espacios de coworking, zonas para mascotas (“pet parks”)— la renta puede incrementarse entre 10 % y 20 % respecto a edificios sin esos extras.

¿Qué buscan los inquilinos hoy?

• Gimnasio dentro del edificio, con clases o entrenadores especializados, lo que evita membresías externas.

• Coworking o business-center interno, ideal para quienes trabajan remoto. Aproximadamente 60 % de los residentes de ciertos conjuntos lo utilizan.

• Zonas para mascotas, ya que más de la mitad de los inquilinos tienen animales de compañía, lo que convierte el pet-park en “necesidad más que lujo”.

Implicaciones para el asesor inmobiliario

Para quienes viven y respiran el negocio de bienes raíces, este cambio de paradigma es clave:

• Al presentar una propiedad para renta, resalta las amenidades como valor agregado, no solo el “metraje” o “ubicación”.

• Para desarrolladores o propietarios que quieren invertir en renovaciones, invertir en amenidades de calidad puede traducirse en mayor renta y menor rotación.

• Para el cliente inquilino (sobre todo millennials y jóvenes profesionales), la narrativa ha cambiado: “quiero vivir, trabajar y disfrutar sin salir del complejo”. Conecta con ese deseo.

🔗Escobar, S. (2025, 7 noviembre). Gym, coworking y pet parks: Amenidades elevan hasta 20 % el costo de rentar en la CDMX. El Economista